En una ciudad de provincias un fiscal que pierde el tren de vuelta a París tiene un encuentro casual con Silvia. Pasarán toda la noche juntos hablando de todo menos de ellos mismos.
Al día siguiente cuando Marc tiene que volver a París, se da cita con Silvia unos días más tarde a una hora precisa en el Jardín de las Tulerías.
Cuando llega el día y la hora de la cita, Marc por un impedimento de trabajo llegará tarde, cuando Silvia ya se haya ido. Durante semanas se lamentará por ello y la echará de menos obsesivamente.
Meses después realizando la instrucción judicial de un caso conocerá a Sofía, con la que empezará a intimar sin saber que casualmente es la hermana de Silvia.
Cuando por motivos familiares tengan que verse los 3 sin que Sofía sepa nada de la historia anterior, se reavivarán los sentimientos de Marc y Silvia, creándose un destructivo triángulo amoroso.
Interesante película con un reparto estelar de actores franceses que comienza de una manera un tanto anodina, para que poco a poco se vuelva entretenida incluso logrando que tú como espectador te sientas involucrado, evocando un sinfín de razonamientos acerca de las casualidades de la vida, de los encuentros fortuitos, de los enamoramientos obsesivos, de las afinidades electivas que diría Goethe, en las que uno de repente se puede ver envuelto y que no necesariamente cuadran en el entorno o en el momento en el que se dan.
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